INSTANTE DE ILUMINACIÓN

Siempre estamos a un instante de la iluminación, aunque la noche sea muy larga siempre llega el instante de la iluminación, cuando andamos por el mundo tenemos que estar alertas ya que de un momento a otro el Amor de Dios nos traerá la oportunidad para que entremos en el proceso interno de la Iluminación, es cosa de solo un instante. 

           Cuando llega el instante de un nuevo amanecer el sol sale y nos impulsa a conquistar el lugar en la vida que Dios tiene para cada uno de nosotros, fíjate bien ese momento, ese instante llega cada día sin que nada lo detenga ni lo interfiera es algo mágico extraordinario y hasta maravilloso, aunque nada hacemos por nuestra parte, ocurre, cada nuevo amanecer nos sorprende con nuevas fuerzas renovadas que nos impulsan con alegría, entusiasmo a vivir la vida abundante; así mismo será en nosotros el Amor de Dios garantiza nuestra iluminación aunque hoy no te lo propongas habrá una gran confabulación universal que te llevará a la iluminación.
Así como todos nos preparamos para que cada día sea productivo y de progreso, así también debemos hacerlo para el instante de nuestra iluminación, debe ser una constante alegría interna, una expectativa gozosa para ese momento cósmico reservado a nuestro favor; solo será un instante entonces todos podremos descubrir los más anhelados misterios de la vida, tendremos la respuesta de quienes somos, nuestro origen, el por qué y hasta cuando de todas las cosas. Todo será una vivencia que desde ese instante se prolongará en la Eternidad.  

Muchas personas se preguntan como empezar a recorrer por el sendero interno de la iluminación, DIOS siempre nos lleva de la mano, solo tenemos que estar alertas, comenzarán a presentarse oportunidades, vendrán nuevos amigos, invitaciones o lo que la gente dice casualidades que te permitirán conocer nuevos temas, libros, cursos, regalos, nuevas maneras de vivir en la confianza y presencia de DIOS, de AMOR, de VIDA, se revelara en ti muchas verdades que son, que existen y que hasta ahora tu no las había conocido, serán como señales luminosas, sentirás como un despertar de alegría y entusiasmo que harán de ti como si estuvieras empezando una nueva vida; en esos momentos tienes que fortalecerte ya que empieza tu verdadero camino a recorrer hacia el corazón de DIOS. Alerta y despierto con el gozo en tu corazón en la dulce espera, puedes decir periódicamente algo así como “PADRE dame la oportunidad, yo también quiero conocerte mejor”. Bueno que la LUZ de DIOS sea tu guía.